28.2.05

Regresiones, oportunidades, TV, rivales débiles y aún más...

Sinceramente no sé ni por dónde empezar. Digamos que mi vida es una caricatura, obra de un dibujante empedernido y romántico que se empeña en crear historias memorables y particulares al mismo tiempo. El dibujante de la ironía y la alegría. Ese es mi dibujante. Soy un dibujo de mí mismo.

Veamos, si tuviera que empezar a relatar todo lo sucedido sin duda escribiría y no pararía de hacerlo hasta que las teclas de mi lap top se rindieran a los golpes de las yemas de mis dedos. Sin duda sería demasiado así que procederé a resumir por eso y porque algunos de ustedes ya saben que ha ocurrido en mi vida últimamente.

Primero que nada ya estoy bien de la operación. Fue un poco doloroso y difícil los primeros dos días y agradezco infinitamente las muestras de atención de aquellos que me llamaron, me fueron a visitar o, simplemente dejaron su comentario aquí en nuestra página. Gracias de verdad. Sirve el dolor al hacernos ver el espejo sin brumas y quienes están a nuestro lado. Duele ver que aquellos que pensabamos estarían a la hora no están...Sin embargo siempre existe una segunda oportunidad ¿no?

Eso por un lado. Mi vista parece de Cíclope. Dios. Es algo impresionante, jajaja, en verdad. Y lo mejor de todo, ¡no cambió el color de los ojos! JAJAJA (chiste local).

Por cierto, perdonarán la manera intempestiva de escribir pero es que tengo mucha emoción contenida y apenas controlo lo suficiente para escribir.

Entre gotas y gotas que inundan mis ojos pasaron estos días. Me enteré de ciertas cosas que quizá no tendría que haberme enterado y de otras que si. Mi camino ha sido bellísimo y parece que por fin encontré la tregua que tanto había añorado. El año pasado ha sido el año más difícil de mi vida por muchas razones y llegué a pensar que "La retirada no es una opción" después de todo parecía no ser tan opción. Sin embargo no claudiqué. No claudiquemos. Aquellos que me conocen saben que una de las cosas que no soporto es la mentira y la otra la cobardía. Menos cuando son proyectos en conjunto. No soporto la idea de que vivimos una sola vez para estar echándonos para atrás cuando la responsabilidad llama a la puerta o el amor por la ventana. En fin, entre dimes y diretes llegué al día de hoy. Con el amor en mi puerta y el sol en mi ventana.

Digamos que la vida me sonrie y con todos los dientes de fuera. Digamos que me empezó a sonreir cuando le devolví la sonrisa que me lanzó de un inicio.

Mi trabajo va muy bien, quizá no es lo que esperaba pero me permite darme mis lujos y, sobretodo, hacerme 100% responsable de mis propios gastos con excepción de la Universidad. Es una satisfacción tremenda. Mi vida personal resulta sumamente satisfactoria y salvo un pequeño detalle de mi vida -relativo al amor- todo parece ir sobre ruedas. Espero que ese capítulo de mi vida encuentre continuidad aunque, como bien comentaba en una reflexión anterior, no sólo depende de mí, también y más de la otra persona, por lo mismo espero que encuentre continuidad aunque dados los acontecimientos recientes, la forma en la que nos hemos comunicado he interpretado ciertas cosas que, espero de todo corazón estar equivocado, parecen ser malos indicios. Todo esto, por supuesto, niños y niñas, por no ser directos. Pero bueno, fuera de eso tengo todo lo que quiero y más en mi vida. Ojalá y pudiera tener eso. Tenernos. Al que no hable Dios no lo oye, dicen por ahí, ¿no?

Entre tantas y tantas cosas, hoy bajaba de mi camión de $2 cuando, cruzando Insurgentes a la altura de Los Almendros, se escucha El Padrino. Jamás hubiera adivinado quién podía ser.

- ¿Bueno?
- ¿Luis?
- Su servidor, ¿con quién tengo el gusto?
- ¡Hola, Luis, que bueno que te encuentro! Soy Gabriela de El Rival más Débil...

Mi andar se detuvo de sopetón. Mi mirada se perdió en la calle y mi mano falló.

- Ajá.. -exclamé sin saber qué más decir-
- Mira, Luis, en verdad pensé que no te encontraríamos -supongo lo diría porque mi celular lo tuve apagado el domingo, aunque dudo que me llamará el domingo- pero nos gustaría contar contigo nuevamente.
- ¡¿En verdad?! -grité al aire, a ella y a mí- ¿Pero cómo o por qué?
- Pues resulta que vamos a grabar un capítulo especial con los mejores participantes en la historia del concurso y tú eres uno de ellos -mi sonrisa se ensanchaba más que el ego mismo-. Por supuesto, ninguno de los concursantes puede haber ganado antes, todos los que jugarán serán finalistas -manera decorosa de llamarnos a los segundos lugares- y quería saber si podíamos contar contigo

Lo primero que pensé y que no pude sustraerme a ello fue: "Coño, de tantos y tantos finalistas pensaron en mí...mmm, me quedé con el Cachirulo clavado en el orgullo..."

- ¡SI! Con muchísimo gusto cuentan conmigo. Ahí estaré. Sólo dime cuando, cómo y todos los detalles.
- Mañana a las 10 de la mañana...

Entre que yo asimilaba (y sigo asimilando) que en menos de 24 horas concursaría por segunda vez en el programa y me trataba de concentrar en las indicaciones que me daba, llegué a mi casa y prendí, pletórico de alegría e impaciencia, mi lap top para escribir. No sé que vaya a pasar mañana y tampoco si las revanchas existen. Solo sé y me acabo de dar cuenta que si, las segundas oportunidades si que existen.

Hago un paréntesis para aquellos que se hayan perdido en el relato. En septiembre grabé El Rival más Débil y llegué hasta la final, a la ronda de muerte súbita. Fuí el rival más fuerte del juego (5 rondas de 8 el rival más fuerte) y fui el que más dinero aportó al Banco. Al final Cachirulo se atravesaría en mi camino y me fui con las manos vacias, pero no con la esperanza perdida. Eso es lo que sucedió.

Ahora me siento muy nervioso y al mismo tiempo feliz. Feliz principalmente por que sinceramente había llegado a dudar de la existencia de las segundas oportunidades, porque mi vida y mi corazón parecían faltos de ellas. Porque justo ahora que más lo necesitaba mi vida ha dado un giro y no soy el que era antes. Soy mejor. Se que lo anterior puede sonar a un discurso posmoderno de éxito y superación, pero no es así. Quizá podríamos sustituir el calificativo "mejor" por completo. Estoy más completo, más preparado. Sé (y lo mencioné arriba) que no me encuentro totalmente lleno y que hay ciertos detalles que me gustaría tener o completar, pero no estan mis manos ya. Lo que está en mis manos en verdad lo he modificado.

Sinceramente no sé ni por dónde empezar. Digamos que mi vida es una caricatura, obra de un dibujante empedernido y romántico que se empeña en crear historias memorables y particulares al mismo tiempo. El dibujante de la ironía y la alegría. Ese es mi dibujante. Soy un dibujo de mí mismo. Un dibujo de mi corazón y mi alma. Ni Walt Disney podría haber imaginado algo mejor.

Tan sólo espero su apoyo y buenas vibras. Todas las llamadas de apoyo serán bien recibidas y, por supuesto, visitas para encorajinarme. Pueden dejar sus comentarios y de verdad échenme todas las buenas vibras del mundo para que esta vez ni Cachirulo o Capulina se atraviesen en mi camino.

Ahí les cuento después. Mañana es el día.

p.d. por cierto, ¿que onda con el cuestionario? hay algunos que me han fallado, ustedes saben a quienes me refiero...

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Ojos Lindos,
Me alegra muchisimo escuchar que todo salio muy bien de tu operacion. Y mas me alegra escucharte con mas animos, por eso dicen "que Dios aprieta pero no ahorca". Te deseo mucha Suerte, espero que esta ves salgas siendo el ganador!!!
Te quiero en PUTA!!
(Gaby)

papialex dijo...

Oraaaaaaaaaaale vargas que bizarro estuvo eso del rival mas débil, ese programa me da mucha risa, la vieja parece de esas maestras de secundaria que nada mas te quieren hacer la vida de cuadritos y ademas dan una clase tipo de español yo creo que por eso tengo tan mala ortografia porque me cagaban!!! En fin men mucha suerte!!

Anónimo dijo...

Hola Luis, leí tus líneas, no juegues, qué profundidad hay en tus pensamientos eh, creeme que vas a ser el escritor de este y los muchos siglos siguientes, el nobel más merecido, me cae que si.

Anónimo dijo...

Luis, no te deseo suerte en el programa, porque suerte se le desea a alguien que se avienta al ruedo sin conocimiento de causa, ese no es tu caso.. concurso o no, la inteligencia no se oculta. te quiero.
Vero

Anónimo dijo...

Luis, no te deseo suerte en el programa, porque suerte se le desea a alguien que se avienta al ruedo sin conocimiento de causa, ese no es tu caso.. concurso o no, la inteligencia no se oculta. te quiero.
Vero

Anónimo dijo...

Luis, no te deseo suerte en el programa, porque suerte se le desea a alguien que se avienta al ruedo sin conocimiento de causa, ese no es tu caso.. concurso o no, la inteligencia no se oculta. te quiero.
Vero

Anónimo dijo...

Luis, no te deseo suerte en el programa, porque suerte se le desea a alguien que se avienta al ruedo sin conocimiento de causa, ese no es tu caso.. concurso o no, la inteligencia no se oculta. te quiero.
Vero

Anónimo dijo...

¿Cómo estás mi estimado Luis? Te mando saludos..Espero que estés mejor de tus ojos y ojalá nos veamos pronto por los caminos de la TV.
Un abrazo
Ricardo López ERMD