8.8.05

¿Amor propio?

"Qué cosa fuera, corazón, que cosa fuera. Qué cosa fuera la maza sin cantera."
"Ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta."
Silvio Rodriguez.
Ustedes disculparán. Fue una semana muy ajetreada y llena de ocupaciones. Fue una buena semana, no me puedo quejar -aunque siempre tiene que existir un negro en el arroz y parece que mi padre no está de los mejores humos existentes; habrá que ver. El jueves me despedí del departamento y Silvia estuvo ahí para apoyarme. El viernes reunión de hombres en casa de Esponda para jugar dominó y ayer fuimos Silvia y Yo a comer, al cine y después a dos fiestas. Buen fin.
Tengo ganas de escribir algo sobre los apodos, su uso, origen y relación cultural. Según yo lo iba a terminar hoy, pero dadas las cirscuntancias que se dieron hoy, no se pudo. Y ahorita que puedo hacerlo ya no quiero. Cierto evento me desmoralizó un poco. Ya saben, de esos momentos, comentarios que te hacen que te vienen a fregar todo. Como cuando vas cargando una bolsa con lodo, cuidando de no ensuaciarte, la logras tirar quedándote limpio y cuando te volteas para regresar, un tipo en bicicleta te salpica. Esa, precisamente, es mi sensación. Estoy un poco confundido, ¿hasta dónde uno tiene que poner empeño, esfuerzo y dedicación y hasta dónde esperar para que la otra persona haga lo mismo?
¿Hasta dónde? Dios, en verdad ruego y deseo saber la respuesta a lo anterior. ¿Hasta que punto tengo que seguir poniendo todo de mí sin recibir mayores alicientes? Y es que me siento un poco triste, un poco confundido. En parte por la incertidumbre, en parte, también, por los comentarios que te envenenan el alma. Me queda claro que la gente no dejará de hablar y, en la medida de lo posible, no presto atención a los comentarios que me hacen, sin embargo no siempre lo puedo hacer y me termina por afectar. Y me revienta que me afecte con esto y ahora. Perdón que no sea más específico pero no puedo serlo, si así lo fuera probablemente me desnudaría por completo y no lo pienso hacer, puesto que no lo han hecho conmigo.
¿Hasta dónde? Perdón, necesito desahogarme. Resulta que soy muy bueno para escuchar y dar los consejos más precisos que la gente necesita -por supuesto, cuando quieren escuchar- pero PUTA MADRE, cuando necesito que alguien me escuche o me diga que demonios hacer...no está.
En verdad, discúlpenme, necesito sacarlo aunque sea así, platicando conmigo mismo. No me importa la verdad si lo leen o no, necesito sacarlo conmigo mismo. Hoy en la noche, cuando necesitaba hablar con alguien para sacar algo que traigo enterrado, no lo pude hacer. Esperé, busqué y no recibí nada a cambio. Eso me puso triste. Antes sólo estaba confundido. Ahora también es un poco de tristeza que viene a condimentar mi maldita confusión.
¡Dios, dime que tengo que hacer! Dime, Dios mío, cuánto más tengo que esperar o hacer. Dime por favor, con una ráfaga de luz el camino que debo de tomar.
Con una centella, cortar el tronco que tapa la vereda.
Con una cruz en el cielo que me devuelva la esperanza.
Con un susurro, de esos que recibo, en la noche mientras duermo, que ya pronto acabará.
Dios mío, por favor.
¿Hasta dónde? Todo parece ir bien pero de pronto te tratan de calentar la cabeza -de envenenar el alma, diría yo-. Y cuando a eso le sumo la falta de comunicación y la "enorme" cantidad de ocupaciones que pretendemos decirle a los demás que tenemos...la situación se va a la mierda.
Directo a la mierda.
En verdad necesito a alguien que me diga que hacer. Alguien que me escuche y después de hacerlo tenga la respuesta necesaria. Muchos dirán: pues pídelo. "Ja Ja Ja", les responderé yo, puesto que me he cansado de pedirlo e insinuarlo. Soy un hombre que se me dificulta mucho abrir mis sentimientos y necesidades frente a los demás y, cuando lo he llegado a hacer, es porque el amor me une con esas personas. Sin embargo, de esas pocas personas, resulta que exceptuando dos, todas las demás no me podrían ayudar. De las otras dos, parece ser que no están interesadas en hacerlo o parece que no se han enterado por estar tan concentradas en ellas mismas.
Me he encontrado con algunas personas últimamente que me tratan de "convencer" de que están conscientes del egoísmo y de la situación actual, cuando más bien pareciera que lo dicen como si fuera un baño de pureza puesto que no están convencidos de lo que dicen. No me convenzan, en verdad no lo necesito. Por mi váyanse a freir french fries, asados argentinos y bailar hip hop y lo de moda en el entretiempo. No necesito ser convencido de nada en lo absoluto, puesto que odio las mentiras y tener que fingir. Fingir no es otra cosa que postergar, postergar lo que, tarde o temprano, tendras que hacer o decir, pero "crees" que no es el momento -entonces ¿cuándo lo es?-
Mi padre me hizo el comentario que me fregó el día. Y después una noticia le vino a dar el remate a mi noche. ¿Hasta dónde es amor propio y hasta dónde egoísmo? Coño, sociedad, escúchenme, alguien dígamelo. ¿Hasta dónde?
Ya estoy más tranquilo. Sinceramente me sirvió de algo. Sin embargo la confusión y la tristeza ahí están. Soy un tipo sumamente paciente -mi vida es una muestra- pero creo que toda paciencia tiene sus límites, los cuales se ven alargados por nuestros esfuerzos. Pero los esfuerzos tienen que ser mutuos.
Mañana entro a clases. Espero que mañana se cumplan las cosas que pido. Ojala y mañana suene mi teléfono y me digan la respuesta. Ojala y encuentre la solución a mi confusión, la cual, trágicamente, no la puedo solucionar yo.

Desahogando. 07 agosto '05
VARGAS GÓMEZ

2 comentarios:

Zilko dijo...

Hellow.... . Nice blog... :D

www.armandoz.blogspot.com

Anónimo dijo...

Hello nice blog site! Added it to my bookmarks for future reference.

I have a Hunter Ceiling Fan Light site/blog. It pretty much covers Hunter Ceiling Fan Light related stuff.

Come check mine out if you get time.