14.2.05

¿En verdad quieres amar?

¿EN VERDAD QUIERES AMAR?

Esta columna la escribí para la revista Intuición hace ya 2 años. La he modificado (remasterizado, para que se escuche rinbombante) y he agregado ciertas cosas. Esto debido a la fecha que nos aqueja y persigue. Se que en la columna anterior decía que no escribiría nada pero tuve tiempo ya que una de mis clases de canceló y no tuve el examen de Ética (Dios...) por lo cual salí desde las 10 de la mañana, así que me encuentro con tiempo suficiente de, por lo menos, dedicar esta columna... Se que algunos leyeron la previa; lean ésta puesto que es diferente.

Si nos encontrásemos a alguien que nos dijera:

No te enamores del amor, enamórate de alguien que te ame, que te espere, que te comprenda aún en la locura; de alguien que te ayude, que te guíe, que sea tu apoyo, tu esperanza, tu todo. Enamórate de alguien que no te traicione, que sea fiel, que sueñe contigo, que sólo piense en ti, en tu rostro, en tu delicadeza, en tu espíritu y no en tu cuerpo o en tus bienes.
Enamórate de alguien que te espere hasta el final, de alguien que sea lo que tú no elijas, lo que no esperes. Enamórate de alguien que sufra contigo, que ría junto a ti, que seque tus lágrimas, que te abrigue cuando sea necesario, que se alegre con tus alegrías y que te dé fuerzas después de un fracaso.
Enamórate de alguien que vuelva a ti después de las peleas, después del desencuentro, de alguien que camine junto a ti, que sea un buen compañero, que respete tus fantasías, tus ilusiones. Enamórate de alguien que te ame. No te enamores del amor, enamórate de alguien que este enamorado de tí
.”

Si nos encontrásemos a alguien que nos dijera lo anterior, más vale que lo hiciéramos a un lado y tratásemos de no darle nuestro corazón.
El amor se ha desvalorizado y ha entrado a una fase en extremo posmoderna. Actualmente hasta la amistad se ha vuelto utilitaria, alejándonos del placer y el goce del verdadero amor. Actualmente necesitamos cuantificar para poder visualizar, después de todo, ¿no dicen que actualmente somos una sociedad de imágenes?
¿Cuánto me amas? ¿Cuánto me quieres? Si existiera una máquina capaz de medir el amor, habría muchos suicidios, desengaños y “quedados”. Afortunadamente no existe ni podrá existir. ¿Por qué? Porque el amor es intangible. El amor no existe. Es duro para muchos enfrentarlo, pero el amor como lo plantean actualmente, no es más que una producción mercadotécnica y sin cabeza. Amorfo. Es más, el amor es dañino.
Todo se ha vuelto tan funcional que hemos creado una fecha especial para regalar y recordar a los que amamos. Me pregunto, ¿qué el resto de los días no deberían ser del amor? ¿No deberíamos de tener el año del amor en vez de UN día de amor? Amor, por cierto, con precio y color, porque de antemano mucho(a)s ya están esperando que si la cena, que si el peluche, que si el globo, que si la gerbera…¿Que si qué? En esta fecha de vendedores de amor y amistad, no perdamos el piso y no nos enamoremos de la mercadotecnia y publicidad. He constatado en unas horas que muchas personas caen en una depresión por el sólo hecho de que este día no les dieron nada…¿Por qué mejor no empiezas a dar?
Si alguien piensa que la “reflexión” incluida en la parte superior de este texto es bella, bien podría volver a leerla concienzudamente, puesto que más que bella es perversa. ¿Cómo se resume? Antes que el Otro estoy Yo. Así de fácil y egoísta.
De acuerdo a los que saben, si y sólo sí partimos del Otro, podemos conocernos a nosotros mismos. El Otro es el que nos nombra, nos permite seguir adelante y dilucidar una posible clausura de nuestra fractura ontológica. Es a través del Otro que puedo compenetrarme y verme a mí mismo. El Otro me permite sospechar que algún día (que nunca llegará) podré estar completo.
Pensar como la “reflexión” del principio, es pensar que el amor solo es bonito y es bello por mí y para mí. Pensar como la “reflexión” del principio, implica la sublimación de uno mismo al grado de amarse a sí, por sí mismo.
En realidad deberíamos de manejar la idea de un proyecto. Un proyecto en el cual no sólo se luche al lado del Otro, sino que también se toleren los defectos y se aprendan a querer, ya que también esos defectos forman el afecto y la construcción del Otro. Un proyecto en el cual exista una compenetración de almas y la mirada del Otro en mis ojos.
Pensar como la “reflexión” del principio sería aceptar que Dios solo quiere a aquellos que se dan golpes de pecho a la entrada del Templo y que adentro del mismo mercadean con su alma misma. Pensar así sería aceptar que no eres más que lo que tú dices de ti mismo. El amor se regocija con la verdad y no podemos más que ser profeta y amantes parciales en tanto nuestro conocimiento es parcial; no pretendamos dar todo cuando ni siquiera nos tenemos en totalidad a nosotros mismos.
Amar. Vivir con amor. Vivir por amor al Qué buscamos y a Quién buscamos. Teñir nuestras vidas y relaciones con amor y alejar el egoísmo y vanidad que lo único que hacen es volvernos ciegos y apartados. Vivir con amor por esa persona para comerse el tiempo y no vivir con el maldito egoísmo que nos han delegado (por miedo) las generaciones pasadas y que provoca, únicamente, perder el tiempo. ¿Después de todo, no se la viven diciéndonos que “estamos jóvenes” y que disfrutemos lo que ELLOS no pudieron o supieron disfrutar? ¿No nos quieren enseñar una forma de vivir la vida? Perdón, no estoy de acuerdo. Vivimos nuestras vidas y nuestro amor como podemos y cómo queremos.

Asomaba a sus ojos una lágrima
y a mis labios una frase de perdón;
habló el orgullo y enjuagó su llanto
y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino, ella por otro;
pero al pensar en nuestro mutuo amor,
yo digo aún: ¿Por que callé aquel día?
y ella dirá : ¿Por que no lloré yo?

Gustavo Adolfo Becker

1 comentario:

Anónimo dijo...

Soy yo Maca, me parecio que la critica que haces del amor esta un poco mal planteada, claro no por q vos penses eso por q se q sos una persona muy enamorada, sino por que tuvistes una reseña un pensamiento en el cual inspirarte, que la verdad estaba escrito de una manera individualista y protectora, todos sabemos que el amor nos hace debiles pero alla de nosotros el poner un punto, el poner un hasta aqui, quiero ser debil por que quiero dejarme amar y anhelo mi indulgencia mi ignorancia por que deseo sentirme amado,sentirme debil, derrotado por la fuerza del amor, amarrado en sus redes, he alla de nosotros el poner un fin el dejar de ser, el sentirnos fuertes ante la vida cuando en realidad deseamos debilidad.

Vargas muy lindo lo de Becker el mas grande enamorado ahora solo te digo que la verdad en tu escritura deberias de retomar un analisis mas tecnico,generico,simple, siento que redindas y por clarificar las cosas te contradecis dale un poco de mi misteria a tu escritura no expliques todo, deja a la incognita y al pensamiento del lector abrazos.... tu amigo Francisco Machado