Increible. En no más palabras se puede resumir y relatar mi experiencia el viernes dando la clase en la Facultad de Derecho. Llegué 15 minutos antes, preparé un esquema en el pizarrón, con flechas y todo -jajaja- para después sentarme a esperar a que llegaran "mis alumnos". Jajaja.
Llegaron y empezó la clase. Al inicio he de aceptar que me encontraba un poco nervioso. Todos se me quedaban viendo con cara "a ver que tiene qué decir este tipo con cara de mamón". Supe afrontar esa actitud mediante otra actitud: ponerme más mamón, jajaja. Dicen por ahí las abuelas que “una mancha borra otra mancha en la ropa”. Pues por ahí me apliqué.
Empecé la clase. Explicar el giro epistemológico en la lingüística hace treinta años fue mi primer objetivo, para de ahí relacionarlo con la gramática del texto, pasar con el discurso y su relación con el texto y poder terminar con el análisis del discurso y la construcción de mundos posibles a través del nombramiento (y su relación con las leyes). Salió muy bien. Me encuentro sumamente feliz.
Así se iba el tiempo, entre letras, palabras y movimientos. Llevaba yo una hora y media dando clase cuando de pronto se abre la puerta:
- Perdón..? –digo mientras me quedo viendo al estereotipo de preparatoriano “mamón”, con la playera Polo levantada del cuello y la actitud física-
- Mmm –dudaba, no se bien si porque no podía articular palabras o porque la neurona no hacía conexión– Es que tengo clase aquí, de Derecho e Información.
- Si, en efecto, esta es la clase –respondí en un tono un poco pedante y cortante– ¿se te ofrece algo?
- ¿Y Adal? –preguntaba como no entendiendo la relación de El Hotel y su salón de clases–.
- No pudo venir y yo estoy cubriendo la clase y el tema de examen...
- Ahh, bueno... –y mientras decía esto empezó a caminar para tomar asiento–.
- Pero..ejem...la puerta estaba cerrada...-comenté yo interrumpiéndolo–.
- ¿Entonces?
- Qué te pones de acuerdo con Adal la próxima clase...la puerta ya está cerrada.
Haber visto su cara. Bueno, la cara de él y de salón, jajajaja. Silencio sepulcral mientras el monito no sabía que decir al tiempo que lo escoltaba a la puerta y cerraba la puerta detrás de él. Volteo para encontrar las miradas de todos posadas en mí. Una mezcla de sensaciones. Excitación. Jajajaja. Antes había llegado mi hermana con unas amigas suyas, Valera y Beto. Fueron a verme, carajo, que buen detalle. Entraron de oyentes a mi clase...Un abrazo, los quiero.
La razón de mi actitud pedante y catedrática se resume a “respeto”. La gran mayoría eran mayores que yo y no podía darme el lujo de ser relajado ya que se me iban a “subir a las barbas”. No sólo mediante el alto que le puse al monito estereotipado “animador de eventos”, también en la forma de dar la clase y manejar al grupo. Aquellos que me conocen en persona saben como soy y algunos inclusive han tenido la experiencia de escucharme hablar en público o dando algún discurso...
En general fue una grata experiencia dar clases en Universidad y a personas más grandes y de diferente carrera. Pero, sin lugar a dudas, lo más satisfactorio de todo fue la actitud del grupo: verlos tomar apuntes de todo lo que decía y anotaba resultaba simple y sencillamente extasiante. Verlos anotar y hacerme preguntas resulto tan gratificante que no quería terminar la clase. Al final la terminé y vino lo mejor: la felicitación.
Carajo, yo mismo como alumno he felicitado a muy pocos profesores. Y que al final me dijeran “deberías de dar la clase tú” o “muchas gracias, me va a servir muchísimo para el examen” entre tantas, fueron frases que me llenaron de alegría. Si toda la semana había manteniedo un desasosiego anímico, el viernes en la tarde me pude olvidar de todo y de aún más.
De ahí en fuera el fin de semana me sirvió para despejar un poco la sensación que me abordó toda la semana, aunque pareciera, como de película (como mi vida ha sido, ha decir verdad) que justo para terminar la semana otra vez regreso a esa sensación, domingo a las 12:39. Conversaciones que conjuran y levantan muertos.
Pero bueno. El viernes en la noche Roberto me invitó a cenar con Mariana y Fer Márquez a Polanco (Mi Bulín) y de ahí nos fuimos al Altavista 154 a festejar el cumple de Toni. Fue un buen viernes, a decir verdad. El sábado normal, tranquilo con mi familia en la mañana, pero antes fui al concierto de Frida y se bajó del escenario para cantarme, jajaja. En la noche fui al cumple de Santoyo en casa de Roberto y estuvo bastante bien, llene de energía la casa, literalmente, ja. Hasta la música emanó. Fue un buen cumpleaños y gran reunión. Felicidades, Santoyo, amigo.
Hoy me regalaron un sweater muy bonito, mi yaya. Sin ningún motivo. Ese tipo de regalos son los que más me gustan, hubo un tiempo en mi vida, hace no mucho, en que tenía muchos de esos de una persona...However...
Mi papá chocó y casi se revienta al tipito. Se echó en reversa como animal y no vió a mi papá y le pegó a su coche –si, al mismo que yo choqué hace mes y medio, jaja-. Bueno, mi padre se transformó. Más porque hoy salía a carretera, precisamente, con su coche y se fue a Guadalajara. Me bajé en friega, cuando vi que se bajaba un coapeño malencarado y combinado con el malgenio de mi padre, juraba que terminaba mal. Afortunadamente todo terminó bien y le pagaron en el instante a mi papá que casi se come al naco ese, pero lo convencí de que no lo hiciera, se iba a indigestar...
Hoy fue un día que se podría resumir como “decrecendo” (léase con entonación italiana). I just need you. Yeah, you’ve got the glue...
Mmm...Bueno, eso fue el fin de semana resumido. Sumamente resumido. Mañana subiré nuevas fotos y nuevas aplicaciones para la página. Eso es todo por hoy. Gracias, en verdad, por ser y hacer aquellos que se han permitido estar. Gracias por no dejarme y apoyarme cuando lo he necesitado, por no poner “peros” ni anteponer otros intereses. Simplemente por no dejarme solo, por apoyarme en las buenas y en las malas...ayer, hoy y siempre; no sólo en el ayer.
Llegaron y empezó la clase. Al inicio he de aceptar que me encontraba un poco nervioso. Todos se me quedaban viendo con cara "a ver que tiene qué decir este tipo con cara de mamón". Supe afrontar esa actitud mediante otra actitud: ponerme más mamón, jajaja. Dicen por ahí las abuelas que “una mancha borra otra mancha en la ropa”. Pues por ahí me apliqué.
Empecé la clase. Explicar el giro epistemológico en la lingüística hace treinta años fue mi primer objetivo, para de ahí relacionarlo con la gramática del texto, pasar con el discurso y su relación con el texto y poder terminar con el análisis del discurso y la construcción de mundos posibles a través del nombramiento (y su relación con las leyes). Salió muy bien. Me encuentro sumamente feliz.
Así se iba el tiempo, entre letras, palabras y movimientos. Llevaba yo una hora y media dando clase cuando de pronto se abre la puerta:
- Perdón..? –digo mientras me quedo viendo al estereotipo de preparatoriano “mamón”, con la playera Polo levantada del cuello y la actitud física-
- Mmm –dudaba, no se bien si porque no podía articular palabras o porque la neurona no hacía conexión– Es que tengo clase aquí, de Derecho e Información.
- Si, en efecto, esta es la clase –respondí en un tono un poco pedante y cortante– ¿se te ofrece algo?
- ¿Y Adal? –preguntaba como no entendiendo la relación de El Hotel y su salón de clases–.
- No pudo venir y yo estoy cubriendo la clase y el tema de examen...
- Ahh, bueno... –y mientras decía esto empezó a caminar para tomar asiento–.
- Pero..ejem...la puerta estaba cerrada...-comenté yo interrumpiéndolo–.
- ¿Entonces?
- Qué te pones de acuerdo con Adal la próxima clase...la puerta ya está cerrada.
Haber visto su cara. Bueno, la cara de él y de salón, jajajaja. Silencio sepulcral mientras el monito no sabía que decir al tiempo que lo escoltaba a la puerta y cerraba la puerta detrás de él. Volteo para encontrar las miradas de todos posadas en mí. Una mezcla de sensaciones. Excitación. Jajajaja. Antes había llegado mi hermana con unas amigas suyas, Valera y Beto. Fueron a verme, carajo, que buen detalle. Entraron de oyentes a mi clase...Un abrazo, los quiero.
La razón de mi actitud pedante y catedrática se resume a “respeto”. La gran mayoría eran mayores que yo y no podía darme el lujo de ser relajado ya que se me iban a “subir a las barbas”. No sólo mediante el alto que le puse al monito estereotipado “animador de eventos”, también en la forma de dar la clase y manejar al grupo. Aquellos que me conocen en persona saben como soy y algunos inclusive han tenido la experiencia de escucharme hablar en público o dando algún discurso...
En general fue una grata experiencia dar clases en Universidad y a personas más grandes y de diferente carrera. Pero, sin lugar a dudas, lo más satisfactorio de todo fue la actitud del grupo: verlos tomar apuntes de todo lo que decía y anotaba resultaba simple y sencillamente extasiante. Verlos anotar y hacerme preguntas resulto tan gratificante que no quería terminar la clase. Al final la terminé y vino lo mejor: la felicitación.
Carajo, yo mismo como alumno he felicitado a muy pocos profesores. Y que al final me dijeran “deberías de dar la clase tú” o “muchas gracias, me va a servir muchísimo para el examen” entre tantas, fueron frases que me llenaron de alegría. Si toda la semana había manteniedo un desasosiego anímico, el viernes en la tarde me pude olvidar de todo y de aún más.
De ahí en fuera el fin de semana me sirvió para despejar un poco la sensación que me abordó toda la semana, aunque pareciera, como de película (como mi vida ha sido, ha decir verdad) que justo para terminar la semana otra vez regreso a esa sensación, domingo a las 12:39. Conversaciones que conjuran y levantan muertos.
Pero bueno. El viernes en la noche Roberto me invitó a cenar con Mariana y Fer Márquez a Polanco (Mi Bulín) y de ahí nos fuimos al Altavista 154 a festejar el cumple de Toni. Fue un buen viernes, a decir verdad. El sábado normal, tranquilo con mi familia en la mañana, pero antes fui al concierto de Frida y se bajó del escenario para cantarme, jajaja. En la noche fui al cumple de Santoyo en casa de Roberto y estuvo bastante bien, llene de energía la casa, literalmente, ja. Hasta la música emanó. Fue un buen cumpleaños y gran reunión. Felicidades, Santoyo, amigo.
Hoy me regalaron un sweater muy bonito, mi yaya. Sin ningún motivo. Ese tipo de regalos son los que más me gustan, hubo un tiempo en mi vida, hace no mucho, en que tenía muchos de esos de una persona...However...
Mi papá chocó y casi se revienta al tipito. Se echó en reversa como animal y no vió a mi papá y le pegó a su coche –si, al mismo que yo choqué hace mes y medio, jaja-. Bueno, mi padre se transformó. Más porque hoy salía a carretera, precisamente, con su coche y se fue a Guadalajara. Me bajé en friega, cuando vi que se bajaba un coapeño malencarado y combinado con el malgenio de mi padre, juraba que terminaba mal. Afortunadamente todo terminó bien y le pagaron en el instante a mi papá que casi se come al naco ese, pero lo convencí de que no lo hiciera, se iba a indigestar...
Hoy fue un día que se podría resumir como “decrecendo” (léase con entonación italiana). I just need you. Yeah, you’ve got the glue...
Mmm...Bueno, eso fue el fin de semana resumido. Sumamente resumido. Mañana subiré nuevas fotos y nuevas aplicaciones para la página. Eso es todo por hoy. Gracias, en verdad, por ser y hacer aquellos que se han permitido estar. Gracias por no dejarme y apoyarme cuando lo he necesitado, por no poner “peros” ni anteponer otros intereses. Simplemente por no dejarme solo, por apoyarme en las buenas y en las malas...ayer, hoy y siempre; no sólo en el ayer.
A aquellos que no me han dejado solo,
que me han apoyado,
sin anteponer intereses personales, amigos o fiestas.
Aquellos que están y lo demuestran más que con su presencia
con su apoyo y amor.
A cada quién a su manera...
GRACIAS TOTALES.
VARGAS GÓMEZ 16 octubre 2005
7 comentarios:
a)Me pregunto: Por qué me entero de los eventos importantes justo cuando ya pasaron?
b)¿Cómo no me iba a bajar del escenario a cantarle a la gente especial?
c)Cerré el domingo de la mejor forma posible: con un excelente amigo.
d)¿cuántas veces te he dicho que te quiero? No sé, pero súmale una!!! Te quiero!
p.d: me fascinó tu sweater!
jajajajajajaja
Felicidades por tu clase don vargas llosa este fin estuvo bien bizarro jajaja
Milagro?
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Vaya Com Dios!
Señor: muchas gracias por su pequeño comentario en la columna, sabes que tu presencia fue una gran alegría en mi pequeña reunioncilla, me da gusto que ye hayas podido abrir espacio entre tus actividades para celebrar conmigo y compartir esos momentos imborrables, lo puse en mi blog: el mehjor cumpleaños, y lo hicieron ustedes: gracias sobre todo por la música.
pinches abogados mamones, que bueno que les enseñaste de los que son capaces comunicólogos de a de veras...
JAJAJAJAJAJA ESE MI ASTERISCO PAPAL, JAJAJAJAJAJA NO NO MAMES, NO TIENES MADRE AMIGO, JAJAJAJA
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